miércoles, 25 de noviembre de 2009


Se considera en peligro de extinción a una especie animal, cuando su existencia se encuentra comprometida a nivel mundial. Esto es debido generalmente a la fulminacion de un recurso del cual dependen todas y cada una de las especie, ya sea por parte de la acción del hombre, como la caza ilegal o la tala de indiscriminada de arboles, o simplemente a cambios en el ecosistema de la especie producto de hechos fortuitos, como lo son el cambio climático. Como está ocurriendo en este preciso momento y por desgracia estos animales en peligro de extincion no están habituados a tales condiciones climáticas y a veces les es imposible adaptarse a dichos cambios En los últimos tiempos, el hombre, se convirtió en una enorme amenaza para los animales, debido a que muchos de los animales en peligro han desaparecido porque destruimos su hábitat natural de vida e incluso hasta los matamos.Biológicamente, para mantenerse vivos en los distintos ecosistemas y que no hayan animales extintos, las especies desarrollaron como estrategia mantener la biodiversidad; no obstante, hoy en día, esta estrategia no es lo suficiente buena como para contrarrestar los efectos de la obra humana (acción antrópica) lo que nos lleva a una serie de consecuencias terriblemente nocivas para el equilibro de los ecosistemas y la vida en el planeta Tierra. Hoy en día hay demasiados animales en peligro de extinción, y la velocidad a la que se extinguen va aumentando cada vez mas. Actualmente se conocen aproximadamente 11.167 especies en peligro de extinción, de las cuales 124 están englobadas en las categorías de “estado crítico”. Se espera que algun dia el ser humano entre en razón y que de una vez por todas entienda que no podemos vivir con tantos animales en peligro de extincion, ya que sin ellos no podríamos seguir viviendo nosotros. Ojala llegue ese dia que tanto anhelamos los que queremos a nuestro planeta Dada la complejidad del tema, las soluciones son aun mas difíciles, hay que mentalizarse y pensar en que ellos también son seres vivos y necesitan un espacio donde poder vivir en paz sin dañar ni perjudicar a nadie Se considera en peligro de extinción a una especie animal, cuando su existencia se encuentra comprometida a nivel mundial. Esto es debido generalmente a la fulminacion de un recurso del cual dependen todas y cada una de las especie, ya sea por parte de la acción del hombre, como la caza ilegal o la tala de indiscriminada de arboles, o simplemente a cambios en el ecosistema de la especie producto de hechos fortuitos, como lo son el cambio climático. Como está ocurriendo en este preciso momento y por desgracia estos animales en peligro de extincion no están habituados a tales condiciones climáticas y a veces les es imposible adaptarse a dichos cambios En los últimos tiempos, el hombre, se convirtió en una enorme amenaza para los animales, debido a que muchos de los animales en peligro han desaparecido porque destruimos su hábitat natural de vida e incluso hasta los matamos.



Esto nos viene a mostrar de una parte, que en México no se cuenta con el número suficiente de especialistas en las diferentes disciplinas ecológicas, y, de otra, que muchas veces se realizan investigaciones siguiendo modelos extranjeros y no según nuestras necesidades. Es urgente entonces la formación de profesionales conscientes de su participación social como científicos. Pero la lucha por salvar la fauna silvestre no puede restringirse a los biólogos. Es necesaria la participación de los gobiernos y del pueblo en general, creando una conciencia de responsabilidad hacia las generaciones futuras.

Todas estas situaciones se han acentuado en el presente siglo debido a la explosión demográfica humana. Cada día es necesario talar bosques y selvas para satisfacer necesidades de alimento y habitación. Por estas razones es importante elaborar un plan nacional de explotación racional de recursos faunísticos. Dicho proyecto debe tener en cuenta una serie de consideraciones sociales, tales como la agricultura que altera zonas naturales y afecta a la fauna. Pero ¿cómo convencer a esta población de poner fin a la perturbación, cuando todos sus esfuerzos apenas bastan para evitar que se mueran de hambre?. ¿Cómo recomendarles no matar un ocelote cuando la venta de su piel proporciona un cierto ingreso que alivia su ya deteriorada economía?. Es por ello, que los científicos involucrados en la conservación de la fauna no sólo deben ser capaces de proponer medidas de protección sino, también en colaboración con otros especialistas, de presentar alternativas de satisfacción a las necesidades del conjunto social y no solamente del individuo.

La contaminación química es, también, causa de daño a la fauna. Los insecticidas aplicados en los cultivos, a la larga entran a las corrientes de ríos y mares, donde son ingeridos por microorganismos que son comidos por peces y otros animales, y éstos, a su vez, devorados por las aves. En cada paso de esta cadena alimenticia, el insecticida se concentra cada vez más. Tales concentraciones en las aves afectadas hacen que produzcan huevos con cáscaras deficientes en calcio, que el paso de las madres rompe durante la incubación. Como consecuencia de este proceso los pelícanos pardos, los cormoranes y otras aves se han extinguido ya en algunos lugares donde antes predominaban. La contaminación por insecticidas ha llegado incluso a la Antártida y el Artico afectando a pinguinos y osos polares.

La extinción de algunos animales o el estado crítico de otros, por acción del hombre ha sido registrada por algunos autores como Heim (1952) que menciona, entre otras especies definitivamente desaparecidas, a la moa (Dinornis ingens) gigantesca avestruz de Nueva Zelanda.
La extinción de la fauna tiene graves repercusiones en los ecosistemas, sobre todo en lo referente a las cadenas tróficas y alimenticias. En la mayoría de los casos, de las especies desaparecidas no se tenía suficiente información acerca de su papel en los diferentes ecosistemas en que participaban.
En nuestro país existen, según la lista de especies en peligro de extinción presentada en la Organización de Estados Americanos (OEA) el 5 de febrero de 1973, cerca de cuarenta especies de vertebrados, tanto terrestres como acuáticos. Por ejemplo, el jaguar (Panthera onca) y el cocodrilo (Crocodylus acutus y C. moreletti), cuyas poblaciones han decrecido debido a la caza de que son objeto para el comercio de sus pieles, el cual, la mayoría de la veces, se realiza en forma ilegal, principalmente en la zona sureste del país.

En México la caza y la alteración del medio ambiente tienen a muchas especies al borde de su desaparición.
Los elementos que constituyen la biósfera, se dividen en inorgánicos, como la luz, el suelo, el agua, y en orgánicos, que a su vez se dividen en flora y fauna.
En todo ecosistema los animales tanto vertebrados como invertebrados, constituyen un factor importante. Sus relaciones con los demás integrantes del ecosistema, contribuyen a mantener un equilibrio relativo, cuya estabilidad, posible gracias a complicados mecanismos de retroalimentación en cadena, se altera fácilmente cuando se incide en cualquiera de sus eslabones, por más insignificantes que éstos puedan parecer.
Desde sus orígenes, los animales han estado en competencia para sobrevivir. Además, cambios constantes en el medio ambiente han dado como resultado la desaparición de algunas especies y el florecimiento de otras. Estos procesos evolutivos ocurren de manera lenta a lo largo de millones de años, sin embargo, cuando el hombre llegó a escena, hace relativamente poco tiempo, los delicados eslabones faunísticos que habían tenido larga permanencia en la naturaleza, empezaron a romperse y verse alterados.
Desde los tiempos más remotos, el género humano ha hecho uso de la fauna silvestre matando o capturando selectivamente algunas de las especies que la integran, bien para liberarse de especies dañinas (serpientes, roedores etc.), o para utilizar su carne como alimento y sus pieles como vestido.

matanza de focas



Clasificación
En sus 4600 millones de años de existencia, el planeta Tierra ha sufrido cambios en su forma y su clima, que han afectado las especies.
Con los cambios de temperatura las plantas y animales sucumben conforme a sus niveles de tolerancia a la lluvia, la luz solar y otros factores que influyen en su sobrevivencia.
La extinción de especies es un proceso natural que ocurre en un período de tiempo suficientemente amplio, que permite la producción de brotes o radiaciones, que aumentan la biodiversidad.
De manera opuesta, los estudios demuestran que por causa de la acción del ser humano desaparecen muchas especies en un corto tiempo de la historia.
Este es un tema de actualidad que las personas analizan desde distintos puntos de vista: hay quienes se preocupan por la pérdida de recursos que generan dinero; otros piensan en la necesidad de buscar nuevos medicamentos y alimentos para abastecer a una población en crecimiento con gran demanda de necesidades. Y hay un sector pequeño que se preocupa por la extinción de las especies que permiten mantener el balance sobre el planeta.
Una especie en peligro de extinción es aquella que cuenta con tan pocos individuos sobrevivientes que podría desaparecer del todo en la mayoría de los lugares que habita. Esto sucede cuando todos sus miembros mueren sin dejar descendientes.
También puede presentarse lo que se conoce como seudoextinción (seudo significa falsa), que ocurre cuando la especie por evolución, da origen a otros linajes genéticamente distintos, más adaptados a nuevas condiciones ambientales.
Por el contrario, una especie amenazada es aquella que aún es abundante en su ambiente natural, pero que si su número disminuye es posible que lleguen a estar en peligro de extinción.
Características de las especies susceptibles de extinción
Bajo nivel de reproducción que impide la recuperación rápida de sus poblaciones.
Hábitos de alimentación especializados. Si se elimina su única fuente de alimento, la especie desaparece. Los colibríes son un ejemplo de alimentación especializada. Ellos han evolucionado conjuntamente con la planta de donde extraen su alimento.
Especies de gran tamaño que requieren grandes cantidades de alimento y de áreas amplias. Por ejemplo: felinos, elefantes, ballenas, etc.
Hábitat de reproducción o de anidamiento especializado. La lapa verde requiere especialmente de árboles de almendro para anidar y estos deben tener un diseño especial que identifica el ave, por ejemplo, la existencia de un hueco en su tronco.
Especies endémicas (que sólo habitan en un lugar específico). Por ejemplo, el sapo dorado, que vive sólo en Monteverde de Puntarenas.
Especies con patrones de migración fijos, como los halcones y águilas que migran anualmente de Norte a Sur para evitar el frío invierno.
Felinos que salen de las áreas protegidas en busca de alimento, atacando al ganado, cultivos o personas.
Comportamiento que los acerca a lugares peligrosos como carreteras o fábricas. En la carretera que atraviesa el Parque Nacional Braulio Carrillo es común observar animales muertos que continúan usando esa zona de forma natural.
¿Cuáles son las principales causa de este peligro? 1. La persecución y matanza por el valor de sus pieles. 2. La caza intensiva y la pesca intensiva para comercializar sus carnes. 3. La contaminación de las especies extrañas a su hábitat, o sea "especies invasoras". 4. Los grandes emprendimientos como represas, hidrovías, etc., que el hombre construye. 5. Pérdida de petróleo, que contaminan los mares. 6. Accidentes naturales como la "muerte gris", erupción de los volcanes que lanza a la atmósfera nubes de cenizas y gases con alto contenido de azufre. 7. La acción de otros contaminantes (yacimientos de uranio, polonio, radio y de otros elementos radioactivos) 8. Accidentes varios, intencionales o no, como los incendios de bosques, choque de barcos, etc.

Tráfico de especies El tráfico de la flora y la fauna se ha convertido en uno de los emprendimientos económicos más redituables y figura en el mundo en tercer lugar luego del de armas y de las drogas. El de la fauna mueve alrededor de 10.000 millones de dólares anuales y la flora, está superando los 7.000 millones. A estas cifras habría que sumarle el tráfico clandestino... Cada año se consumen en el mundo entre 600 y 900 toneladas de marfil, que se obtienen de unos 150.000 colmillos de elefantes adultos. En 1990, el comercio de marfil se prohibió internacionalmente. Según el CITES, el tratado mundial que regula el comercio de especies protege a las que están en peligro de extinción, la población de elefantes africanos se redujo de 1,3 millones de ejemplares a poco más de 600.000, durante la década del ochenta. Otra década similar bastaría para provocar la extinción de la especie. Pero no es este el único caso. Según los datos de las organizaciones TRAFFIC y WWF, cada año se comercia ilegalmente con primates, ave, pieles de reptil y de mamíferos, orquídeas, cactus y peces exóticos. Su destino son EEUU, Europa, Japón y parte del sudeste asiático. Y los usos que se les dan son tan variados como la peletería de lujo (una piel de pantera siberiana alcanza los 100.000 dólares en el mercado negro), ornamentos, productos pretendidamente afrodisíacos y, en algunos casos, animales de compañia o plantas para jardines. A causa de este comercio ilegal, unas 700 especies se encuentran al borde de la extinción. Pero, además, otras 2.300 especies animales y 24.000 vegetales están amenazadas.
El Gran Mercado Negro de Especies Actualmente, el tráfico ilegal de especies supera los 4.000 millones de dólares al año, y sólo el contrabando de armas y el narcotráfico generan cantidades superiores. Según datos de TRAFFIC y WWF, a consecuencia directa del comercio ilegal, unas 700 especies se encuentran en peligro inmediato de extinción. Primates: Más de cincuenta millones de primates son capturados anualmente y utilizados en laboratorios de investigación (los menos) o como animales de compañía. Elefantes: Unos 150.000 colmillos de elefantes (entre 600 y 900 toneladas de marfil) son esquilmados para fabricar productos artesanales o decorativos. Reptiles: Diez millones de pieles de reptil se destinan a la confección de bolsos, zapatos u otros productos de lujo. Parte de los reptiles van a parar a terrarios como exóticos animales de compañía. Aves: Cinco millones de aves son capturadas con destino a los salones de casas de países desarrollados, restaurantes de lujo y coleccionistas privados. Felinos: Unos quince de millones de pieles de mamíferos(nutrías, felinos, etc.) engrosan cada año lujosas peleterías en EEUU, Europa y Japón. Ranas: Cerca de 250 millones de ranas (sobre todo, ranas toro) son capturadas en sus hábitat naturales con destinos a restaurantes. Peces: Entre 350 y 600 millones de peces ornamentados son capturados para abastecer acuarios y peceras en todo el mundo. Cactus: Ocho millones de cactus son recogidos clandestinamente. Su destino son las casas de los países occidentales. Orquídeas: Casi nueve millones de orquídeas y flores de los bosques tropicales son recolectadas con destino a países occidentales. Coral: Más de dos toneladas de coral se convierten anualmente en ornamentos y objetos decorativos.
Las diez especies más amenazadas Algunas de las especies podrían desaparecer en las primeras décadas del siglo XXI. Su uso comercial está totalmente prohibido. Tigre de Siberia: casado por su piel. Quedan unos 200 ejemplares. Nutria Gigante: capturado por su piel. Ha desaparecido en Uruguay y quedan pocos centenares en Argentina. Cocodrilo del Nilo: perseguido por su piel. Águila Imperial Ibérica: quedan unas 150 parejas en libertad. Tortuga Marina: perseguida por coleccionistas y ofrecida como curiosidad en restaurantes de lujos. Gorila de Montaña: destinado a zoológicos, coleccionistas e institutos de antropología. Quedan unos 600 ejemplares en las montañas húmedas del continente africano. Guacamayo Escarlata: importados por grandes cantidades por los EEUU. Rinoceronte Negro Africano: quedan unos 2.000 ejemplares. En los años setenta, su población alcanzaba los 65.000. Panda Gigante: utilizados en zoológicos y apetecidos por su piel. Quedan unos mil ejemplares en todo el mundo.
INTEGRANTES.

paula rodriguez mendez.
luz maria cecilia ramirez hernandez.
evelyn mendoza arteaga.
merari jaqueline cano ortiz.
5.7